La estrella francesa decidió no pasar por el quirófano, pero aún es una incógnita cuando recibirá el apto médico para jugar.
Su presencia contra Países Bajos está casi descartada y se habla de un regreso para instancias decisivas.
Sin haberse consumado la primera jornada, la Eurocopa se paralizó por completo cuando Kylian Mbappé, en la victoria de Francia contra Austria, abandonó la cancha con la nariz fracturada y ensagrentada al impactar su rostro contra el hombro del central rival Kevin Danso. Las aguas se calmaron recién cuando se descartó la posibilidad de pasar por el quirófano y que abandonara el torneo. Pero en Les Blues todavía se agarran la cabeza: ¿arriesgarán a su estrella o la resguardarán confiando en un pasaje a octavos de final?
Desde el momento en que el capitán francés abandonó la cancha faltando cinco minutos y fue atendido de urgencia en el Hospital Universitario de Düsseldorf, todo el Viejo Continente se mantuvo en vilo: medios europeos llegaron a confirmar la intervención quirúrgica, hasta que la federación francesa dijo lo contrario y trajo augurios positivos. Según el diario AS, Mbappé decidió cancelar una posible operación sobre su tabique que le fue recomendada, que lo alejaría un mínimo de 10 días de las canchas, y prefirió arriesgar su salud al no querer perderse el torneo bajo ningún punto de vista.
Lo que ahora está asegurado para el flamante refuerzo del Real Madrid es que, sin importar cuando vuelva a jugar, deberá hacerlo con una máscara hecha a medida que le proteja la zona afectada “con materiales blandos, ligeros y acolchados“, según las reglas de la International Board. Aunque hay una primera traba: el artículo protector requiere de tiempo para elaborarse, sumado a que debe utilizarse en al menos una práctica para testear su comodidad y descartar algún tipo de ajuste. Pero el reloj corre para el entrenador Didier Deschamps y compañía…
La próxima parada de Francia será este viernes, nada menos que contra Países Bajos, el potencial máximo competidor por el liderato del grupo debido que ambos ganaron en sus primeros duelos. A tres días de un partido clave, todo se trabaja a contrarreloj en la federación Blue. Según comenta el diario español Marca, Deschamps mantiene la calma al saber que el diagnóstico de su figura es mejor de lo esperado, sumado al hecho de haber conseguido los tres puntos en su debut ante Austria, por lo cual “tendría en claro que lo mejor es asegurarse al mejor Mbappé para los octavos de final“. Siguiendo esta línea, desde Canal Plus Francia anuncian que el ’10’ no se pondrá los botines contra los neerlandeses.
Más allá de descartarse una cirugía, los médicos del seleccionado no dieron nueva actualización sobre el estado de Kylian, aunque desde Europa afirman que la idea sería no arriesgarlo hasta instancias clave de la competencia. Esto es considerando que a octavos de final también se clasifican los cuatro mejores terceros, provocando que una derrota contra Países Bajos no pondría contra las cuerdas al combinado campeón del mundo en 2018.
Igualmente, en caso de ser necesario y siempre y cuando reciba la autorización médica, el portal The Sun no quita la posibilidad de que Mbappé salte a la cancha contra Polonia, el martes 25 de junio por el cierre de su grupo, ya vistiendo una máscara protectora pero con el tratamiento de recuperación a medias.
En medio del estado de alerta que vivían los aficionados franceses por una posible pérdida de su figura en la primera fecha de la Eurocopa, el jugador austríaco con el que impactó Mbappé en el momento de su fractura, Kevin Danso, realizó un pedido de disculpas públicas sobre la situación.
“Estoy decepcionado de que Kylian Mbappé haya sido lesionado en nuestro partido. Quiero que esté bien consolidado y espero que pueda ocupar rápidamente su lugar en el campo”, escribió el zaguero a través de sus redes sociales.
Igualmente, Kylian intenta tomarse su fractura con humor. Mientras era atendido en el hospital, el propio astro se encargó de desdramatizar: “¿Alguna idea de máscaras?”, preguntó en su cuenta de X. Por el momento, el artículo que lucirá en el rostro aún es una incógnita que no deja de preocupar a todo Francia.