El médico platense Pablo Colaci podría recibir una condena de hasta 50 años.
El juicio oral integrado por un tribunal de 12 personas analizó todos los elementos de acusación.
Después de 10 días de debate, controversia entre pacientes y exposición de doctrina sobre medicina, un jurado popular declaró culpable al urólogo Pablo Colaci, acusado de abusar de sus pacientes mientras los atendía en su consultorio. Tendrá que seguir en prisión y ahora sólo queda resolver el monto de la pena que le corresponderá.
En el juicio oral y público realizado en los tribunales de La Plata, los hombres y mujeres del jurado popular que evaluaron la acusación y la defensa de Colaci se inclinaron por el veredicto condenatorio. El especialista estaba involucrado en 17 denuncias por abuso sexual. Todas realizadas por personas que se atendieron en su consultorio privado entre marzo de 2015 y enero de 2018. El delito que le imputaron es abuso sexual gravemente ultrajante por la condición de quien lo ejecutó. Uno de ellos, menor de edad
Todos pasaron por la sala de enjuiciamiento de la calle 8 entre 56 y 57. De acuerdo con los testimonios había una conducta reiterada por el médico: los hombres declararon que en la consulta les pedía que se desnudaran y se acostaran en la camilla, luego se ponía de espaldas a ellos y les practicaba maniobras de masturbación. Además, uno de los denunciantes lo acusa de haberlo obligado a eyacular, otro aseguró que le practicó sexo oral y un tercero declaró que Colaci lo llevó al baño del consultorio y lo obligó a que le practique sexo oral.
Hasta que se destapó este escándalo en el círculo profesional platense, Colaci era considerado un prestigioso experto con trayectoria y pergaminos académicos. Es más: mientras permanecía detenido por este proceso, recibió un premio por una investigación que dirigió junto a otros colegas. Fue condecorado por la Academia Nacional de Medicina por su trabajo sobre “Nefrectomías parciales laparoscópicas en un hospital público: técnica quirúrgica, supervivencia posoperatoria y biomarcadores”. Proponían una nueva variante para prevenir la reincidencia del cáncer de riñón.
Cuándo se conocieron las denuncias
La primera denuncia se conoció a principios de 2018. Un menor le dijo a su madre que en una atención Colaci lo tocó mientras realizaba una revisión.
El 19 de marzo de 2018, la Justicia allanó el consultorio privado y la casa de Colaci y se lo llevó detenido por “abuso sexual gravemente ultrajante para la víctima por las circunstancias de su realización”. A partir del primer testimonio, que recibió la fiscal Betina Lacki, se reunieron otros 16 casos y se resolvió su procesamiento. Cuando lo detuvieron la primera vez, era presidente de la Sociedad de Urología de La Plata.
Días después se dispuso la prisión preventiva en la Unidad N°22 de Lisandro Olmos. Estuvo casi dos años alojado en ese centro y en diciembre de 2019 fue beneficiado por la prisión domiciliaria.
Pero en marzo de 2023 volvió a una celda penitenciaria. Es que otro paciente denunció un presunto abuso cuando lo atendió en su casa donde estaba con domiciliaria. Habría ocurrido en julio de 2022. El juez de ejecución dispuso su traslado al complejo de cárceles de Florencio Varela. Desde allí llegó al juicio oral.
El 24 de junio comenzó el último tramo del proceso. Los abogados defensores –José Luis Villada y Gabriel Mendy- propusieron el mecanismo de juicio por jurado que está previsto en el código de procedimiento provincial para delitos que contemplan más de 15 años de prisión en expectativa. Es el caso de Colaci , que podría tener una condena de hasta 50 años.
Se escucharon testimonios de hombres atendidos por el médico: los que lo acusaron y otros que lo apoyaron en su rol profesional. Quienes lo elogiaron recordaron su “calidad profesional y su compromiso con la ciencia”. Uno de ellos lloró al evocar que en 2011 le diagnosticaron un cáncer de vejiga terminal y afirmó: “Colaci me salvó la vida”.
Antes, los denunciantes reiteraron sus relatos. A cada testimonio el imputado le respondía y explicaba en qué consistieron las maniobras médicas polémicas que, según se defendió, estaban descriptas en los libros de urología.
La defensa convocó también a especialistas que trabajaron a la par del urólogo. Lo describieron como “muy correcto con pacientes y personal”, según declaró Alejandra Ceriani, instrumentadora quirúrgica y ex compañera de trabajo del acusado. Agregó que “nunca” recibió quejas de los pacientes de Colaci quien “siempre explicaba al paciente qué se hace” sobre su cuerpo y no dudó en señalar que lo recomendaría como profesional.
También expusieron médicos de los servicios de urología de los Hospitales San Martín de La Plata y Evita Pueblo de Berazategui. Todos coincidieron en la “calidad profesional”. Aunque ante una pregunta concreta de la acusación tuvieron que aclarar que en urología no se masturba a los pacientes, tampoco los médicos extraen con sus manos muestras de semen ni se les provocan erecciones.
De acuerdo con el procedimiento de juicio por jurados, se necesitan más de ocho votos en el mismo sentido (sobre los doce posibles) para declarar culpable al acusado.
La acusación está a cargo de la fiscal Helena De La Cruz y de la abogada Andrea Mattessich en representación de una de las presuntas víctimas que el momento de los hechos era un adolescente de 15 años quien fue a una consulta médica para iniciarse sexualmente y salió horrorizado.
La dirección técnica jurídica del debate es responsabilidad de la jueza Silvia Hoerr del Tribunal Oral Criminal (TOC) II de La Plata. Luego de la decisión de los ciudadanos convocados por la Justicia, Hoerr deberá resolver el monto de la pena.