El stock en poder del BCRA equivale a cerca de US$ 4.600 millones. Un diputado K afirmó que se trasladó una parte del stock rumbo a Londres y habló del riesgo de embargos.
El Gobierno podría utilizar el oro como garantía para tomar fondos baratos y garantizar los pagos de deuda.
Mientras se miró durante todo el año qué cantidad de dólares podía comprar el Banco Central para engordar las reservas, el patrimonio del BCRA se incrementó gracias a la suba del precio del oro. En lo que va de 2024, el precio de este metal subió un 16% en Wall Street. Es decir que solo por la tenencia de oro, el stock de reservas subió cerca de 600 millones de dólares desde enero. Los contratos en Nueva York cotizaban este lunes a cerca de 2.400 dólares y se estima que el BCRA tiene oro, hoy, por el equivalente a unos 4.600 millones de dólares. A fin de 2023, el oro de las reservas equivalía a unos 3.965 millones de dólares.
En estos días, el oro del Banco Central quedó en el medio de varias discusiones.
Por un lado, el diputado kirchnerista y líder del gremio bancario, Sergio Palazzo, deslizó que el BCRA habría trasladado oro desde las bóvedas de Reconquista 266 a Londres, aunque el destino final podría ser la ciudad suiza de Basilea. Palazzo mencionó dos vuelos de British Airways, y sobre esa especulación hizo un pedido de informes al Gobierno, para que ratifique o no esa afirmación.
El ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó, el viernes, que las reservas se habían “movido”, pero no dijo de dónde a dónde. “Es una movida muy positiva del BCRA porque hoy tenemos oro que es como si fuera un inmueble, un edificio; no se puede usar para nada. En cambio, si ese oro está afuera, se le puede sacar un retorno. El país necesita maximizar los retornos sobre sus activos. Y tenerlo encerrado en el BCRA sin hacer nada es negativo”.
Sobre estas declaraciones se podría especular que efectivamente se movió oro desde Argentina a Londres o Basilea. O también que las reservas que hoy tiene el Banco Central en Basilea quietas y sin generar rendimiento, puedan ser “movidas”, en sentido figurado, para que generen algún tipo de retorno o beneficio al Banco Central.
Vale aclarar que desde hace años, el grueso del oro que pertenece al Banco Central están en Basilea porque allí tiene su sede el Banco de Pagos Internacionales (BIS, por sus siglas en inglés) que es conocido también como el Banco Central de los bancos centrales. Dato no menor. Los fondos o activos allí depositados (por caso oro) son protegidos por “inmunidad soberana”. No hay pedido de embargo que pueda alcanzarlos.
Justamente el temor a embargos por parte de acreedores de la Argentina –fondos que reclaman por caso 16.000 millones de dólares por la estatización irregular de YPF ordenada por la ex presidenta Cristina Kirchner e ideada por el actual gobernador bonaerense Axel Kicillof– es que se puso en cuestión el riesgo que se habría asumido -de haberse concretado- por este supuesto traslado de oro, hasta ahora ni confirmado ni desmentido por las autoridades.
Volviendo al uso del oro. Una opción disponible es colocarlo a plazo fijo (siempre sin moverlo de Basilea) para que genere un rendimiento, mínimo pero superior al 0% que genera hoy.
La otra posibilidad, y tal vez la que tiene más chance, es que además de poner unos meses ese oro a plazo fijo, utilizarlo también como garantía para tomar un préstamo puente, o Repo: dinero que se toma prestado pero poniendo como garantía el oro. Hoy, como se dijo, el oro argentino vale unos 4.600 millones de dólares. Se podría pedir una suma inferior o parecida a esa, por un plazo no muy largo, pero a una tasa de interés mucho menor a la que debería pagar una Argentina que hoy exhibe un riesgo país cercano a los 1.600 puntos.
Una pista la dio el propio presidente Javier Milei el viernes por la noche. Dijo que además de estar garantizados los dólares para hacer frente al pago de intereses por unos US$ 1.600 millones que vencen de enero de 2025, estaría cerrado un Repo para hacer frente al pago del capital (algo más US$ 3.000 millones).
Lo ideal para el equipo económico sería que para enero de 2025 el riesgo país muestre un nivel menor a 1.000 puntos. Si así fuera, se podría hacer frente a una parte de los vencimientos con dólares propios y con el faltante hacer un roll over aunque sea de corto plazo.
¿Y el costo de la operación?
Responde un funcionario: “Si ponemos US$ 4.000 millones en oro de garantía para que nos presten US$ 2.000 millones, no tiene riesgo. Una referencia podría ser la tasa de financiación garantizada a un día (SOFR) que la fija el la Reserva Federal de EE.UU. y hoy ronda el 5,3% anual.
En Economía subrayan: “Siempre trabajamos en diferentes planes y alternativas para asegurarnos y dar tranquilidad sobre la capacidad de pago de nuestras obligaciones. El repo es una de esas alternativas, comprar los dólares de las obligaciones de Enero 2025, también”.
Más sobre el Repo, según la visión de los funcionarios: “Es una opción razonable. Si pensás vender el oro, históricamente está en niveles muy altos. Si apuntás a sacarle una tasa, el monto sobre el que percibís la tasa está alto en términos históricos. Si pretendés pedir plata contra el respaldo en oro, hoy te prestan más que en el pasado. Dependiendo de los tiempos para recuperar el acceso al mercado, un Repo puede funcionar como un puente en ese camino”.