Cubrió vencimientos por casi $ 6 billones
Hubo suba de tasas en la letra con vencimiento en diciembre
En julio, vencen US$ 2.500 millones de bonos en dólares
En una nueva jornada de tensiones cambiarias por la suba del dólar blue y la pérdida de reservas, el Gobierno sorteó otra licitación de deuda en pesos este miércoles y colocó $ 8,4 billones. De esa manera, cubrió los vencimientos de la semana y obtuvo un excedente de $ 2,7 billones para pagar el vencimiento de bonos soberanos en dólares que vence en las próximas semanas.
La Secretaría de Finanzas anunció que las ofertas sumaron un total de valor efectivo de $15,1 billones, una parte de los cuales quedaron afuera. En la subasta, se ofrecieron cuatro letras capitalizables en pesos (Lecap) con vencimientos en julio, agosto, septiembre y diciembre de este año, y se reabrió un bono ajustado al dólar con plazo hasta diciembre de 2025.
Como las dos letras más cortas fueron declaradas desiertas, la colocación más corta fue a 91 días (septiembre), siendo la que más apetito despertó en los inversores al captar el 70% de la colocación. Mientras que el resto del financiamiento obtenido correspondió a la Lecap de diciembre y, en menor medida, al bono dólar linked.
“La tasa de 4,5% estuvo por encima de las comparables al cierre de ayer en materia de duration. Al ser una letra nueva no sería correcto decir que “subió tasa”. Y si bien está por encima de la TEM mínima de la licitación previa y de la TEM de la letra de septiembre, al ser más larga es normal que haya algo de premio en términos de TEM”, explicó Franco.
Finanzas explicó que “el producido de esta licitación, por encima de los vencimientos de $5,7 billones, será utilizado para comprar los dólares necesarios para pagar los próximos vencimientos de deuda en moneda extranjera durante el mes de Julio”. El próximo 9 de julio vencen US$ 2.550 millones, de los cuales US$ 2.130 millones están en manos de privados, según EcoGo.
El desafío que enfrenta el gobierno es que la migración de deuda incrementa la necesidad de sostener el ajuste fiscal para mantener la refinanciación de la deuda en pesos o eventualmente pagarles a los tenedores de títulos del Tesoro. Dado que no hay crédito externo, el Gobierno viene pagando la deuda externa en dólares con el endeudamiento interno y el superávit fiscal.