Tras su gran temporada en Roma, el ex Boca quiere ser el dueño del círculo central en la Scaloneta.
Decidirá el DT, que más de una vez avisó y demostró que la titularidad se gana en los entrenamientos.
Cuando la Selección Argentina parece tener una formación armada de memoria, el fútbol se encarga de patear el tablero de Lionel Scaloni. Pero el entrenador albiceleste vive dando muestras de que no tiene compromiso alguno con ningún nombre propio a excepción de un tal Lionel Messi, el capitán. El resto sabe que nadie tiene el lugar ganado.
Leandro Paredes puede dar fe de eso. Llegó al Mundial de Qatar 2022 como una pieza clave del equipo pero el físico no le permitió estar al cien por ciento y al DT no le tembló la mano para sacarlo. Desde ese momento, el volante surgido en Boca casi siempre quedó relegado al banco (fue titular en apenas 3 de los 13 cotejos que la Argentina jugó luego de la tercera estrella). Sin embargo, en la antesala de la Copa América, la puja por adueñarse del círculo central vuelve a estar equiparada.
El padre de la Scaloneta tiene entre tantas virtudes la de saber elegir a los candidatos adecuados cuando la titularidad ofrece un hueco por lesión, suspensión o alguna razón futbolística. Scaloni suele darle la chance a quien mejor ve en los entrenamientos, aunque sin desconocer la actualidad del jugador en su respectivo club.
Lo hizo con el lateral derecho durante todo su ciclo hasta que dio con Nahuel Molina. También con el tercer volante. Y hasta con el centrodelantero. “Juega el que mejor está”, repite. Es una frase que en boca de algún que otro técnico puede resultar trillada, pero en la de Scaloni todos saben que habla en serio.
El mediocampo no es la excepción. Es una zona neurálgica para el juego de la Selección. El dueño del puesto de volante central en la era post Mundial de Rusia 2018 era Paredes, sin dudas. Junto con Rodrigo De Paul, por caso, se convirtieron en los futbolistas con más presencias de este ciclo (63 De Paul y 58 Paredes).
Claves sobre el césped y fundamentales en el grupo. Vale recordar la anécdota de ellos dos yendo a tocarle la puerta a Messi en una de las primeras concentraciones para jugar al truco, romper el hielo y poner la piedra fundamental de una hermandad que luego ganó todo.
Pero se dio un antes y un después de Qatar. Los ingresos de Enzo Fernández, Alexis Mac Allister y Julián Alvarez en plena Copa del Mundo dieron vuelta cualquier previsión. Entraron para no salir más, sobre todo los volantes ya que Julián sigue rotando mucho más con Lautaro Martínez. Después de la final en el Lusail, Enzo participó en 12 de los 13 partidos de la Mayor (11 de arranque), mientras que Alexis estuvo en 11 (10 desde el inicio).
Paredes aceptó su bajón físico y futbolístico, agachó la cabeza y se propuso acompañar, demostrar cada vez que le volvía a tocar y, sobre todo, trabajar para recuperar ese terreno que supo conservar en gran nivel. Su espectacular temporada en Roma lo posiciona nuevamente entre las primeras consideraciones de Scaloni, que nunca dejó de tenerlo en cuenta. En el club italiano jugó 37 partidos (35 desde el arranque).
“Me siento muy bien física y futbolísticamente. Llegar de esta manera a la Selección me hace muy bien y me pone muy contento porque puedo dar muchísimo más de lo que di el año anterior por las lesiones”, dijo Paredes tras ser titular en el triunfo amistoso ante Ecuador en Chicago. “Sin dudas puedo dar más, siempre me preparo de la mejor manera para llegar a esta competición”, agregó.
Scaloni tiene a uno de sus soldados de la primera hora nuevamente a tope. Y con la mira puesta en la defensa del título obtenido en el Maracaná en 2021 nadie, puertas adentro del búnker celeste y blanco, arriesga que el mediocampo titular en la final de Lusail con Francia siga intocable en tierra norteamericana.
Mac Allister parece número puesto. El de Liverpool ha alternado con Enzo Fernández entre el puesto de ‘5’ posicional e interior. Justamente el del Chelsea es quien llega con menor rodaje por la operación de hernia inguinal a la que se sometió a inicios de mayo. Así y todo Enzo ha disputado 35 cotejos en el conjunto de Londres, con 31 titularidades.
Aparece, a su vez, otro viejo-nuevo actor, ausente por lesión en el último Mundial, aunque hombre fuerte para el grupo y en la contemplación del cuerpo técnico: Giovani Lo Celso. El zurdo también quiere ganarse de nuevo una plaza en los primeros planos del once.
Son buenas noticias para Scaloni y compañía, pero al mismo tiempo resultará un lindo dolor de cabeza decidir cómo conformar el núcleo de la Scaloneta. Si se le pregunta al pujatense responderá sin dudar: “Jugará el que esté mejor”. Ahí está el problema.