El Presidente no cierra la puerta a un frente con el líder del PRO de cara a las legislativas del año próximo.
A contramano de lo que impulsa un sector de su Gobierno y hasta su entorno, Javier Milei busca mantener un vínculo estrecho con Mauricio Macri. Tras casi dos meses sin reunirse y apenas cruzar unas palabras durante la firma del Pacto de Mayo, el Presidente buscará aprovechar el regreso del líder del PRO de Europa para retomar el diálogo cara a cara y fortalecer la relación, no sólo para mantener el respaldo a su gestión que ha ofrecido el macrismo a pesar de la tensión por los fondos de la coparticipación porteña, sino también pensando en las elecciones legislativas, un desafío decisivo para la administración libertaria: en la intimidad, el jefe de Estado no descarta “en absoluto” la idea de que La Libertad Avanza confluya en una misma coalición con el partido amarillo y prefiere evitar una confrontación que diluya el voto antikirchnerista.
“Es una definición que se tiene que tomar más adelante pero ¿por qué no? Compartimos electorado y los dos (espacios) tenemos en claro que no puede volver el kirchnerismo y que tenemos la gran oportunidad de terminar con esa etapa nefasta de la Argentina”, argumenta una voz de extrema confianza de Milei.
Milei sabe que a partir del armado nacional que está haciendo su hermana, la secretaria general de Presidencia, Karina Milei, no va a depender de terceros para el armado de listas, y es consciente de que entre sus principales asesores, encabezados por Santiago Caputo, prevalece la idea de que el oficialismo no necesita de terceros para llevar adelante la cruzada contra el kirchnerismo. Pero el jefe de Estado se esfuerza por cuidar los vínculos que lo apoyaron en la recta final de la campaña presidencial. “Una cosa es querer construir para que nadie te pueda apretar y otra cosa es ser desagradecido. Y Javier no lo es”, aclara un interlocutor inobjetable, que remarca una frase que dejó Milei en la charla con Alejandro Fantino en Neura: “A veces uno no tiene que ser injusto. Yo podría agarrar y decirle ‘Soy yo’, pero no es así. La primera semilla del cambio la sembró él”, reconoció el mandatario.
“Macri es un aliado significativo, no solamente por las características de sus dirigentes sino porque compartimos un electorado importante”, reforzó Francos, que ya anticipó que a su regreso de unos días de descanso planea llamar a Macri. El ex Presidente también tiene previsto verse con la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
En el universo libertario no pasó inadvertido el mensaje de Francos. En especial por la postura “purista” de Caputo y de Karina Milei. Por eso, varios dirigentes que hablaron con el jefe de Estado desde entonces quisieron despejar las dudas para tener en claro dónde pararse en la contienda. Sobre todo en redes sociales, donde continúan casi todas las batallas que emprende el Gobierno.
Según pudo reconstruir Clarín de fuentes de su extrema confianza, lejos de rechazar ese plan, Milei lo alimenta: en la intimidad, admite la posibilidad de un armado conjunto que incluso tenga a Mauricio Macri como candidato a primer senador por la Ciudad de Buenos Aires y “un reparto justo” de las bancas por la Provincia de Buenos Aires.
Algo similar a lo que en 2013 tejió el PRO con Sergio Massa para frenar el intento del kirchnerismo de una “Cristina eterna”.
“Javier no lo habló con él y no sabe si Mauricio (Macri) quiere ser candidato, pero si quisiera jugar él lo vería con los mejores ojos”, dice una alta fuente del Ejecutivo a este diario. Hasta el momento la chance de que el ex Presidente sea candidato sólo fue planteada tímidamente por un sector alineado con el jefe de Gobierno, Jorge Macri, primo del líder PRO, pero como alternativa en caso de que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, busque competir por La Libertad Avanza. En el macrismo buscan mantener la identidad PRO pero tampoco descartan un acuerdo electoral con el oficialismo en un frente que, al cabo de las Legislativas, les permita diferenciarse, con la premisa de que no forman parte del oficialismo.
Milei se divide internamente porque, como dijo el viernes en la entrevista, también está “agradecido” con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien libró -y por ahora perdió- una disputa con Macri en el PRO; y no quiere hacer movimientos que puedan significar una intromisión en esa contienda. ¿Será cierto que propuso garantizarle a Bullrich que habilitará que compita por la Jefatura de Gobierno en 2027 como forma de apagar el conflicto en el corto plazo? Un alto funcionario, con peso en la toma de decisiones, lo desmiente.
En público, le hizo más guiños: “Esta semana tuve intenciones de hablar con Mauricio pero me pasaron algunas cosas. No pude, pero lo hubiese querido hacer. Lo que tenga que hablar lo voy a hacer”, anticipó.