El Guillermo Laza tiene capacidad para 3.000 personas.
Será el escenario del duelo de este viernes, a las 15.
En febrero, por la Copa de la Liga, se impuso por 3-0.
Entre música electrónica y bebidas energizantes, River cerrará un semestre en el que tuvo altibajos pero lo termina en carrera por la Liga Profesional, en la que está a un punto de los líderes y la Copa Libertadores, en la que fue el mejor de la fase de grupos.
El equipo de Martín Demichelis volverá a visitar la cancha de Deportivo Riestra, cuatro meses después de hacerlo por primera vez.
Y volverá a pasar de jugar en el estadio más grande de Sudámerica, el Monumental, con 85 mil personas todos los partidos, a hacerlo en el más pequeño de la Primera División.
Es que el Guillermo Laza superó en ese sentido al de Barracas Central, la cual River visitó en 2023 y tiene una capacidad de 4.400 personas (hasta el inicio de sus obras de ampliación). Y ni en el paso por la B Nacional que incluyó el viaje a Madryn para jugar contra Guillermo Brown, ni las decenas de partidos que jugó en los viejos Nacionales en los que pasó por sedes muy remotas del Interior (Huracán de Comodoro Rivadavia es uno de tantos ejemplos), jugó en canchas tan pequeñas como la de Riestra.
Pensar que a River en 2020 no lo dejaron jugar en el RiverCamp, cuando volvió el fútbol en medio de la pandemia del coronavirus y la institución de Núñez había empezado las reformas del campo de juego. La cancha 1 del predio de Ezeiza tiene una capacidad para 2.000 personas, cifra cercana a la del Laza.
En aquel momento, se expuso como argumento que el reglamento marcaba que “no se podía jugar en un predio de entrenamiento, sino en un estadio”.
A Riestra se lo habilitan a pesar de que la misma normativa del fútbol argentino indica que en Primera los partidos no se pueden desarrollar en un estadio con capacidad menor a 15 mil personas.
En ese escenario, entonces, River deberá jugar como lo hizo en el verano. El 11 de febrero goleó 3-0 a Riestra por la Copa de la Liga.
Eran otros momentos, claro. De un River más fuerte. Y no de este que llega al final del semestre con algunas turbulencias. Es que si bien viene de dos victorias consecutivas, una ante Táchira por la Copa Libertadores, para quedar como el mejor primero de la fase de grupos y la otra con Tigre, por la Liga, también arrastra la eliminación con Temperley por la Copa Argentina y una dura derrota ante Argentinos Juniors en La Paternal, donde dejó una pálida imagen.
Entonces, en la cancha de Riestra, donde ya cayeron Independiente y San Lorenzo, River no quiere sorpresas. Y tratará de disimular las ausencias de peso. No estarán Franco Armani, Paulo Díaz y Miguel Borja, afectados a sus selecciones. Volverá Leandro González Pirez y Micho podrá contar con Claudio Echeverri y Pablo Solari, quienes ya volvieron del Sub-23.
Por su parte, Riestra va por la historia. “Contra River, tenés que tener el día perfecto”, aseguró su entrenador Cristian Fabbiani, DT del equipo del Bajo Flores, ex futbolista e hincha reconocido de River. El Ogro también dijo que sueña con dirigir al Millonario en algún momento. El fútbol argentino da para todo.